Relocalización de poblado costero de Tunas de Zaza no avanza lo esperado

Las acciones vinculadas al Plan de Estado para el Enfrentamiento al Cambio Climático, también conocido como Tarea Vida, no avanzan lo esperado en Sancti Spíritus, debido fundamentalmente al déficit de recursos materiales y financieros necesarios para ejecutar las inversiones previstas.

Según detalla el informe presentado al último Consejo de Gobierno en el territorio, aún no se ha podido comenzar el proceso de relocalización del asentamiento costero de Tunas de Zaza, con pronóstico de afectación total por ascenso permanente del nivel medio del mar para el 2050.

Entre las razones de este ya notable atraso, se menciona el déficit de combustible que ha impedido la ejecución de la terraza técnica para la microlocalización de 40 viviendas biplantas.

Además, tampoco se ha contado con el acero necesario para el refuerzo estructural en la obra de fábrica y se ha mantenido un déficit de asignación de materiales, tales como acero, cemento y áridos, para la elaboración de los paneles y losas de hormigón armado, solución arquitectónica propuesta para las viviendas por edificar.

Como alternativa ante estas realidades, se identificaron tres nuevas áreas en el poblado de Guasimal y en el camino El Dap, para la ubicación de 38 viviendas, para las cuales hoy se trabaja en el levantamiento topográfico.

Además, se han elaborado variantes por el arquitecto de la comunidad, de casas con el empleo de bóvedas y otras soluciones estructurales que permitan la utilización de materiales locales.

Igualmente, se solicitó un área de estudio con vistas a ubicar aproximadamente otras 200 viviendas y ejecutar el anteproyecto de las mismas.

Sin embargo, la relocalización del asentamiento de Tunas de Zaza, con vistas a salvarlo del mar, también tropieza con otras situaciones complejas, como la falta de fuente de abasto de agua para más de 136 viviendas y de sistema de tratamiento de residuales.