Por la ruta de María Antonia
La Reserva Ecológica Alturas de Banao es un escenario geográfico que siempre sorprende y difícil resulta conocer palmo a palmo toda esa riqueza natural que encierra.
Cada sendero te regala sorpresas y así sucede cuando enrumbas, a lomo de mulo o a pie, por los trillos, loma arriba y llegas a la Casa de María Antonia, hoy una de las estaciones biológicas de la Reserva, otrora finca de una campesina, que por nombre llevaba el de María Antonia.
Si algo allí resulta interesante es el nivel de conservación existente y los frutos del trabajo de rescate de producciones de la montaña como el café.
Par de caobas hondureñas enormes, de unas tres décadas de vida, son la primera señal de esa conservación, señal que se multiplica cuando ante tus ojos aparecen arboles maderables, frutales, y un ecosistema que atrapa, por su salud.
Desde Jarico a la Casa de María Antonia la distancia es corta y se desanda rápido porque todo el entorno natural que te rodea hace más placentera y rápida la travesía.