La alimentación comienza por el surco
Siempre que se siembra se recolectan frutos. Foto: Oscar Alfonso Sosa.
El término soberanía alimentaria es archiconocido por los cubanos, tanto por la importancia que reviste para el bienestar de la población y la economía, en estos tiempos tan complejos, como por la reiteración del mismo en los más diversos escenarios.
La palabra persuade, orienta, sugiere, pero lo vital sigue siendo sudar el campo, la única manera posible de que desde los surcos llegue el alimento a los hogares cubanos y otros destinos sociales.
Recursos limitados es hoy una constante, pero cabe preguntarse, ¿es eficiente toda la atención, que no siempre depende de lo material, a quienes hoy le meten el pecho a la tierra?
Y la base del compromiso está ahí, cuando esos hombres, muchachos muchos, sientan que son tenidos en cuenta y que su sudor vale.
La tierra siempre tendrá hombres que la abonen con su sudor. Foto: Oscar Alfonso Sosa.
En el campo el trabajo nunca está ausente. Foto: Oscar Alfonso Sosa.
Para producir la tierra hay brazos, el compromiso para con ellos es imprescindible. Foto: Oscar Alfonso Sosa.
La alimentación comienza por el surco. Foto: Oscar Alfonso Sosa.
Para la soberanía alimentaria el hacer lleva miradas atentas. Foto: Oscar Alfonso Sosa.
