Fidel, un hombre de detalles
Junio de 2002. “Hay que evacuar cuanto antes. Toma todas las medidas, pero sería la hecatombe, lo nunca visto”. Desde el otro lado de la línea telefónica llega la orden del Comandante em Jefe Fidel Castro al Primer Secretario del Partido en Sancti Spíritus.
Fidel se mantuvo al tanto de la evacuación de los habitantes de Jatibonico en junio de 2002.
La presa Lebrije, de Jatibonico, está a punto de “reventar” por tanta agua acumulada. Filtraciones en la cortina. A 8 kilómetros, al sur, los casi 25 000 habitantes del poblado. A las 3 y 10 de la madrugada del 15 de junio de 2002 comienza una evacuación sin antecedentes en Cuba, que finaliza a las 6 y 31 de la mañana.
Minutos más tarde, Fidel conoce del término de la movilización; le confiesa a las autoridades de la provincia que le habían hecho recordar momentos históricos de la Revolución como la invasión de Camilo y Che.
El líder cubano hubiera querido estar allí; pero a las 8 de la mañana hablaría desde la tumba de Maceo, en El Cacahual, para suscribir el carácter irrevocable de nuestro Socialismo en la Constitución.
Luego, sucedieron más llamadas. Insiste en la protección de los bienes dejados. Al saber de la muerte de un perro orienta repartir comida a los animales domésticos. Lebrije realmente fue lo nunca visto.
EL SENTIDO DE LA URGENCIA
El huracán Dennis le “jugó sucio” a los trinitarios el 8 de julio de 2005. En el programa televisivo Mesa Redonda Informativa del día 11, Miguel Acebo Cortiñas, primer secretario del Partido en Sancti Spíritus por esa fecha, actualiza a la opinión pública acerca del tenso panorama existente: se pronostica un mes sin servicio eléctrico, el abasto de agua es casi nulo.
Fidel define prioridades: “El lugar más urgente es Trinidad”. Valora la tardanza en el arribo de grupos electrógenos designados por él, alternativa para el funcionamiento de centros de Salud, panaderías, estaciones de bombeo de agua… Los equipos llegan antes del amanecer y fueron instalados en tiempo récord.
El líder cubano sabe cuánto significa para el pueblo tanto tiempo sin energía eléctrica. En la línea de 110 KV Cienfuegos-Trinidad se forma un nuevo “ciclón”. Trabajadores eléctricos de varias provincias acuden. Las Fuerzas Armadas Revolucionarias apoyan de modo decisivo.
A un lado, el mar; al otro, las montañas del Escambray; encima, la noche. Postes arriba, líneas tendidas. En 15 días alumbra la noticia.
Fidel destinó —recordó Acebo— una cuota de alimentos diferenciada para el municipio trinitario, además de materiales constructivos.
Era el mismo Comandante que atento a los detalles en las más disímiles circunstancias por las cuales Sancti Spíritus ha atravesado como huracanes y peligros en las presas, asombró con aquella pregunta durante aquella emisión de la Mesa Redonda, luego de la embestida de Dennis:
—¿Pasó algo con la torre de Manaca Iznaga?