CIGB espirituano, 35 años de ciencia para la vida

Cuando en la celebración nacional en Sancti Spíritus del aniversario 33 del asalto a los cuarteles Moncada, en Santiago de Cuba y Carlos Manuel de Céspedes, en Bayamo el líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz, sugirió la creación de un Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB) en la provincia, se abrían las puertas en el territorio para una nueva etapa de la ciencia.

El CIGB espirituano cumple 35 años, con una actividad científica de prestigio. Foto: Oscar Alfonso Sosa.
Tres décadas y media después de aquel acontecimiento, el CIGB espirituano es hoy una de las instituciones científicas del país con un reconocido aval por sus quehaceres, tanto para el desarrollo de la salud humana y animal, como para la producción agropecuaria.
La investigación y la producción revelan importantes dividendos en la institución. Foto: Oscar Alfonso Sosa.
Si de retos hablamos, la institución tiene hoy, dentro del grupo BioCubaFarma, la responsabilidad de generar la mayoría de los anticuerpos monoclonales que necesitan la mayoría de los proyectos de investigación, ya sea para el diagnóstico o desarrollo de nuevos productos.
Investigar, una constante en el CIGB. Foto: Oscar Alfonso Sosa.
Si de resultados se habla, allí está el aporte de anticuerpos, de proteínas diagnóstico que usaron el Centro de Inmunoensayo (CIE) y hasta el Instituto Finlay de Vacunas (IFV), que demandaban los reactivos biológicos a Sancti Spíritus para la producción de los antídotos, que salvaron millones de vida en el país y en otras latitudes, en la lucha contra la pandemia originada por el virus SARS-Cov-2 (Covid-19).
La investigación y la producción revelan importantes dividendos en la institución. Foto: Oscar Alfonso Sosa.
Diagnosticadores rápidos utilizados en la salud humana y medicina veterinaria, aportes en la extensión de maíz híbrido transgénico y soya transgénica, desarrollo de sistemas analíticos asociados a la generación de anticuerpos monoclonales, todo el quehacer relacionado con el uso del Heberprot-P (factor de crecimiento epidérmico humano recombinante) en el tratamiento de la úlcera del pie diabético, entre otros, prestigian el quehacer del CIGB espirituano en sus 35 años de vida.
El CIGB espirituano arriba a sus 35 años de vida, con un sólido aval en su quehacer. Foto: Oscar Alfonso Sosa.
La obtención de diagnosticadores rápidos, como el del embarazo, es uno de los méritos del CIGB espirituano. Foto: Oscar Alfonso Sosa.
El Bioterio es puntal en el desarrollo de las investigaciones del CIGB. Foto: Oscar Alfonso Sosa.
Fotorreportajes, Sancti Spíritus , Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, CIENCIA CUBANA, CIENCIA E INNOVACIÓN, CIGB