Más luz para la esperanza

Ataviados con sus batas blancas, dueños de una alegría contagiosa, con la sonrisa de quien vence la primera y más difícil de las pretensiones de un compromiso retador, regalando brisas de bienestar, muchachas y muchachos de la Universidad de Ciencias Médicas, hicieron la noticia.

A sus manos llegaron hoy los títulos de graduados, unos en Medicina, otros en la licenciatura de enfermerías, y en otras tecnologías de la salud.

Es luz, oxígeno y sangre, para un sector que, transitando por senderos complejos, pero sin detenerse, en los andares de hacer por la vida.Muchachos con sus Títulos de Oro, los destacados en actividades deportivas y culturales, en la docencia, los mejores integrales, recibieron el reconocimiento al mérito, en un ambiente donde los profesores, la familia, los amigos y funcionarios y dirigentes de diversos organismos, fueron también protagonistas de un suceso, que a Cuba multiplica.

Más corazones para el sistema de salud cubano, de esos que saben que muchas almas esperan por ellos, para sumar esperanza.

Para los egresados es un día especial.

Los graduados extranjeros vencieron un sueño.

Con los nuevos graduados se fortalece el sistema de salud.

La familia presente en el suceso.

Para los mejores graduados, la distinción.

Después de un largo período de sacrificio, el premio llega.

Para la familia, la graduación de los hijos es un momento excepcional.

La Plaza de la Revolución Mayor General Serafín Sánchez Valdivia, escenario del suceso.