Desde la más tiernas de las bondades, Martí vive

Los rostros alegres, con esa chispa inquieta y tierna de la infancia. Se miran los disfraces, sonríen y poco a poco se ordenan en la marcha que los lleva a desandar aquellos cuentos de la Edad de Oro. Fotos: Oscar Alfonso.

Los rostros alegres, con esa chispa inquieta y tierna de la infancia. Se miran los disfraces, sonríen y poco a poco se ordenan en la marcha que los lleva a desandar aquellos cuentos de la Edad de Oro.

Otra vez vuelven los niños a ser protagonistas, en el homenaje a José Martí, en el aniversario 172 de su natalicio.

Fotos, pañuelos, banderas y la emoción propia de los agradecidos invaden el ambiente, que se llena de luz más allá de los brillantes rayos del sol. Que se llena de amor y esperanza.

Son ellos, con Martí desde los corazones, quienes mantienen vivo al Maestro.

Los niños matizaron el homenaje a Martí en el aniversario 172 de su natalicio.

Diversas fueron las iniciativas en el desfile martiano.

Entre los niños, Martí siempre está presente.

La bondad y la ternura de los niños hace vivir al Maestro.

Los personajes e historias de la Edad de Oro, siempre presentes.

Alegría multiplicada en el homenaje a Martí.

Así se vivió el homenaje a Martí en el desfile martiano.

De esta manera se vivió el desfile martiano.