Martí entre sus guerreros

Martí entre sus guerreros

Finales de noviembre de 1891. En Tampa, Florida, que olía al criollísimo tabaco por los cuatro costados, José Martí, el artífice de la Guerra Necesaria, departió con representantes de varias organizaciones, entre estas la Liga Patriótica Cubana, y en cuyo intercambio hablaron acerca de la necesidad de la actuación unificada para superar las condiciones negativas, ha apuntado el doctor en Ciencias Ibrahim Hidalgo Paz.

“Un paso decisivo al respecto —comenta el historiador— fue la redacción del documento conocido como Resoluciones, en el que se recogieron las ideas coincidentes, y cuya autoría corresponde a Martí”.

Como otros especialistas, Hidalgo Paz destaca la relevancia de la primera visita del más universal de los cubanos a esta urbe floridana, al significar el comienzo del proceso que condujo a la fundación del Partido Revolucionario Cubano, y a la organización de los patriotas hasta el logro del reinicio el 24 de febrero de 1895 de la lucha armada contra España.

Esa trascendencia ni por asomo pasaba por la cabeza de los asistentes al banquete de despedida en honor al Apóstol, celebrado el 28 de noviembre en el Liceo Cubano, donde Candita Carbonell, hija del prócer espirituano Néstor Leonelo Carbonell, le obsequió una pluma y un tintero como recuerdo del club Ignacio Agramonte y de la Tampa cubana.

Miles de sus pobladores, liderados por Carbonell, desfilaron hasta la estación ferroviaria para despedir al autor de Nuestra América, quien posteriormente diría: “(…) jamás tuve un goce tan puro, y de tan íntima majestad, como entre los míos, entre mis cubanos, entre mis guerreros y mis ancianos y mis trabajadores”.

Apenas bastaron tres días para que Martí conociera la realeza del guerrero espirituano, ponderado en un artículo publicado en Patria en 1892:

“Vive en Tampa, como un padre del pueblo, el fidelísimo cubano Néstor Carbonell. (…) el que preside hoy: a la vez que su escuela y su ejemplar familia, el Cuerpo de Consejo del Partido Revolucionario Cubano, —peleó ayer con los patriotas de las Villas; les oyó la poesía y la oratoria, ya veteada de oro nuevo, como monte que va echando la costra”. Ese hombre, también escribió el Maestro al dedicarle un ejemplar de Versos Sencillos, es un “cubano fundador”.

Quizás, en ese momento el Maestro recordó aquella madrugada del 26 de noviembre de 1891, cuando la Luna reluciente quedó ahogada por los nubarrones, que empapaban Tampa, colmada de emigrados españoles, cubanos e italianos, atraídos por las tabaquerías.

Quizás, en ese momento recordó, también, el último pitazo de la locomotora en el paradero ferroviario; y jadeando aún la máquina sobre los rieles, descendió el viajero del armatoste de hierro.

—¡Viva Martí!

No te pierdas nada. Únete al canal en WhatsApp de  Radio Sancti Spíritus.

#

Sancti Spíritus

Deja un comentario

Aún no hay comentarios. Sé el primero en realizar uno.

También te sugerimos

Radio en vivo
Al aire ahora:

Sigue a Radio Sancti Spíritus